Creo en dictaduras de libertad, no en democracias financiadas.
Creo en lágrimas que mojan la piel, no en sonrisas de papel.
Creo en gestos sencillos, no en palabras amables.
Creo en presentes reales, no en bellos futuros.
Creo en lo que me haces sentir, no en lo que me dices.
Creo en pasiones sin adjetivos, no en sueños hermosos.
Creo en reacciones arrolladoras, no en alergias controladas.
Creo en el ser humano, no en el hombre.
Creo en ti sin mí, no en mí sin ti.
Creo en que quiero creer, no en que pueda creer.