Hoy hemos hecho el amor. Bueno, la verdad es que lo he hecho yo solito porque ella casi ni se ha movido. Estaba algo rígida durante todo el acto y no la he oído llegar al orgasmo. La verdad es que a mí me hubiese gustado oírla gemir, jadear, suspirar y pedir todas esas cosas que tanto me excitan. Deben ser los nervios de la primera vez, de toda la pasión acumulada en estos tres días que llevamos conociéndonos. Lo que si no ha perdido es su sonrisa, señal de que se lo estaba pasando bien conmigo. Esperemos que a medida que coja confianza se suelte un poco más. A pesar de todo, a mi me ha gustado hacerlo.
En un instante nacemos, en otro morimos. Resulta curioso que esos espacios breves de tiempo, fugitivos, frágiles y efímeros nos condicionen tanto la existencia que se conviertan en el título necesario de los capítulos de las historias que vivimos. Cuentos, leyendas, fábulas, intrigas, mentiras, traiciones, incomprensiones, odios, amores, enredos, sentimientos al fin, son los que modifican el rumbo del camino que sucede entre ellos, la Vida.
miércoles, 8 de diciembre de 2010
La chica que me gusta (día tres)
Hoy hemos hecho el amor. Bueno, la verdad es que lo he hecho yo solito porque ella casi ni se ha movido. Estaba algo rígida durante todo el acto y no la he oído llegar al orgasmo. La verdad es que a mí me hubiese gustado oírla gemir, jadear, suspirar y pedir todas esas cosas que tanto me excitan. Deben ser los nervios de la primera vez, de toda la pasión acumulada en estos tres días que llevamos conociéndonos. Lo que si no ha perdido es su sonrisa, señal de que se lo estaba pasando bien conmigo. Esperemos que a medida que coja confianza se suelte un poco más. A pesar de todo, a mi me ha gustado hacerlo.
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