- Aún hoy me pregunto el porqué desapareciste.
- Bah! Déjalo. Lo importante es que he vuelto ¿no?
- Si, en cierta manera es así, pero no estás igual ¿Qué ocurrió?
- Bueno… ya sabes. Eres listo… el calor… el verano… ¡la abstinencia! ¡No me lo hagas explicar, anda!
- No, no. Ya te has dado cuenta que he sido discreto pero…
- ¿Pero?
- … sabiendo los motivos de tu marcha entenderé si tu vuelta es una continuación o una nueva etapa.
- ¿Qué te va a aportar el saber eso? Estoy aquí ¿verdad? ¡Pues no te hagas más preguntas!
- Si, tal vez tengas razón y mejor será no preguntar sobre algo que no va a tener una respuesta que me guste.