En un instante nacemos, en otro morimos. Resulta curioso que esos espacios breves de tiempo, fugitivos, frágiles y efímeros nos condicionen tanto la existencia que se conviertan en el título necesario de los capítulos de las historias que vivimos. Cuentos, leyendas, fábulas, intrigas, mentiras, traiciones, incomprensiones, odios, amores, enredos, sentimientos al fin, son los que modifican el rumbo del camino que sucede entre ellos, la Vida.
miércoles, 16 de marzo de 2011
En carboncillo
No se puede enmarcar el erotismo.
Nadie ha logrado dibujar la sensualidad.
Nunca se ha podido inmovilizar la pasión.
Pero la belleza, tu belleza aunque sea al carboncillo, es una delicia que no solo debemos admirar sino que tenemos que adorar.
¡¡Felicitats!!
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